Digamos que estas buscando un automóvil usado y te has encontrado con una joya del 2005 en venta. Está claro que, con kilometros bajos y en condiciones excelentes, el automóvil rara vez fue conducido y ha sido bien cuidado. Incluso las llantas se ven como nuevas. Naturalmente, estás interesado en la compra. Esos neumáticos son probablemente los originales. No importa cuán buenas sean las condiciones en las que parecen estar los neumáticos, tienen que irse, de acuerdo con los fabricantes de automóviles, las compañías automotrices y los defensores de la seguridad.
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Existe cierta fluidez en cuanto a cuándo los neumáticos se deterioran con la edad, porque las razones de su degradación son numerosas. Pero los neumáticos de 12 años de edad superarían todos los límites de edad. La mayoría de los fabricantes de neumáticos dicen que las llantas deben ser inspeccionadas después de seis años y reemplazadas después de 10 y varios fabricantes de automóviles recomiendan reemplazar los neumáticos después de seis años de uso. Los neumáticos se debilitan con el tiempo debido al calor, la oxidación, la humedad y otros factores externos, como el lugar donde se conducen o almacenan. Incluso los neumáticos que nunca se usen. Seamos realistas, los neumáticos no son lo mismo que el buen vino.
“Los neumáticos usados son un riesgo sin importar qué, porque no se sabe quién los tenía antes”
Más bien, se puede considerar que los neumáticos viejos son similares a las bandas de goma, dijo Sean Kane, fundador y presidente de Safety Research & Strategies. Si tomas una banda de goma vieja y la estiras, puedes ver grietas y si la estiras, se romperá. El riesgo que corres al usar una llanta vieja es la separación de la banda de rodadura y luego, obviamente, la posible pérdida de control del vehículo.
Dejando de lado la fecha de nacimiento, otra señal que debe buscarse en los neumáticos viejos es la verificación del clima, también conocida como podredumbre seca. Esto puede aparecer como pequeñas grietas en los lados o en las huellas de los neumáticos, decoloración leve o deformación de la carcasa, lo que significa que el neumático se está deformando. Los neumáticos usados que vienen con un vehículo también pueden verse perfectamente bien, especialmente si están almacenados en condiciones ideales, incluso si están cerca o mucho más allá de su marca de seis años. Pero las apariencias engañan, según Bob Toth, director de relaciones industriales de Goodyear en América del Norte. “Si se ve bastante bien, eso es una señal positiva, pero incluso no sabes si fue reparado o reparado adecuadamente”, dijo Toth. Podría haber tapones de cuando se reparó la llanta, o simplemente pudieron haber hecho un arreglo estético.
“Los neumáticos usados son un riesgo sin importar qué, porque no se sabe quién los tenía antes”, dijo Dan Zielinski, portavoz de la Asociación de Fabricantes de Neumáticos de EE. UU. (USTMA). Esta es también la razón por la que grupos como el USTMA han estado tratando de imponer restricciones a la venta de neumáticos usados. Tal esfuerzo tuvo éxito recientemente en Nueva Jersey , donde una nueva ley impone una multa a una empresa que vende neumáticos que han tenido reparaciones inadecuadas o muestran condiciones inseguras, como huellas desgastadas u otros daños visibles. Obviamente, la USTMA recomienda comprar neumáticos nuevos para evitar comprar algo que envejezca menos como un buen vino y más como un yogur detrás de un radiador.